Cocinar por amor al prójimo

Cocinar por amor al prójimo

Sor Juliana Cruz

Recetas de Sor Juliana Cruz

 

El amor de Sor Juliana Cruz por la cocina surgió cuando era niña, mientras ayudaba a su mamá a preparar las comidas de su numerosa familia, un hogar católico de 13 hermanos que crecieron apoyándose unos a otros.

“Como éramos tantos, teníamos la costumbre de hacer competencias. De esa manera, hacíamos de los quehaceres de la casa un juego”, recuerda Sor Juliana sobre su infancia en el pueblo de Las Piedras, Puerto Rico, donde aprendió la importancia de la unión familiar.

Cocinar para la familia fue su mejor escuela culinaria, no solo porque le permitió ejercitarse en el arte de mezclar sabores y texturas, sino también comprender que a través de su talento en la cocina podía ayudar a los demás.

Lo que nunca imaginó fue que, años después, sus habilidades culinarias le permitirían liderar un programa social para combatir el hambre de su comunidad y participar en un reconocido reality show del canal Telemundo, con la meta de ganar el premio para ayudar a su amado Puerto Rico.

El llamado a servir

Sor Juliana creció en una familia llena de fe. Todas las tardes se reunían a rezar el Santo Rosario y cuidaban de la capilla de su barrio. Desde muy joven empezó a trabajar en una fábrica, siempre teniendo presente que su verdadera vocación era servir.

A los 21 años recibió el llamado a consagrarse y se unió a las Hermanas Dominicas de Fátima, una comunidad cuyo apostolado es llevar a Cristo a la familia y a las familias a Cristo. Después de nueve años en el convento, decidió estudiar Trabajo Social para así enfocar aún más su vida al servicio de los más vulnerables.

Ya estando en el convento en la remota población rural de Maricao, continuó perfeccionando su talento culinario, preparando las comidas de sus hermanas. Para ella, el principal ingrediente de una buena receta es el cariño. “No importa lo que uno haga en la cocina. Si uno se dedica con corazón y lo hace con entrega, queda exquisito”, dice.

Sor Juliana también ha puesto su sazón al servicio de los demás. Como parte de su apostolado, dirige el Instituto de Desarrollo Integral para la Familia y la Comunidad (IDIIFCO), donde cocina y brinda comidas calientes a los más necesitados.

Desde el mismo instituto, lidera las celebraciones de la comunidad. Todos los años realiza el Festival de Indieras para honrar a los indígenas taínos de Puerto Rico. Con el carácter sereno y alegre que la caracterizan, ella está detrás de esta fiesta que convoca a artistas y artesanos para mantener viva la herencia ancestral taina.

Su comida es imprescindible en la celebración, por eso su convento la pone en venta para que todos puedan disfrutarla al ritmo de la música puertorriqueña, que resuena durante todo el festejo.

Sor Juliana prepara una de sus recetas ganadoras en un programa de cocina de Telemundo.
Sor Juliana prepara una de sus recetas ganadoras en un programa de cocina de Telemundo. Foto por Alex Díaz para CRS.

¿Una religiosa en un reality show?

La labor social de las Dominicas de Fátima es reconocida y fue gracias a ello que Sor Juliana terminó participando en un popular reality show de cocina, donde se ganó el corazón de la comunidad hispana.

En ese entonces, los productores del programa buscaban a una religiosa dispuesta a preparar sus recetas frente a las cámaras y permanecer en un estudio de televisión en Miami durante ocho semanas.

Investigando, dieron con Sor Juliana. Al principio, ella no quería participar, pero sus hermanas la convencieron de que era una gran oportunidad representar a su congregación y a Puerto Rico en un concurso de televisión nacional.

Se presentó a la audición y quedó seleccionada, pero dos semanas antes de viajar a la grabación del programa, el huracán María devastó Puerto Rico. Fue entonces cuando decidió contactar a los productores y cancelar su participación.

La magnitud del desastre era tal que Sor Juliana quería quedarse en su tierra ayudando, pero el presidente de Telemundo la fue a buscar personalmente al convento para que reconsiderara su decisión. Logró convencerla de continuar con el argumento de que, si ganaba, podía destinar el premio del concurso para ayudar a los más afectados por el huracán.

Sor Juliana entonces decidió seguir adelante. Durante todo el reality show siempre sostuvo en sus manos un rosario, el cual solo soltaba para cocinar. También elaboraba rosarios para regalarle a sus compañeros de competencia y al equipo de producción. Aunque fue eliminada, Sor Juliana logró ganar millones de corazones y llevar esperanza a sus hermanos boricuas.

“En la cocina servimos y todo lo que se haga con empeño, con amor, con dedicación y con entrega es una forma de celebrar la vida”.

Al igual que Catholic Relief Services, la pasión de Sor Juliana siempre ha sido servir a los más vulnerables, a quienes ha dedicado todos sus talentos con una fe sin fronteras.

En este Mes de la Herencia Hispana celebramos con orgullo sus 40 años de trabajo social y su especial sazón en la cocina con la que acompaña las celebraciones de su pueblo; la misma sazón que utiliza para servir al prójimo y cuyo secreto es muy latino: cocinar siempre con el corazón.

Historias relacionadas

Una voz que alcanzó al mundo entero

Conoce la inspiradora historia de este periodista hispano, quien con perseveranc… MÁS

Los López: fe, familia y mariachi

Descubre cómo la música y la fe se entrelazan en la vida de esta familia mexic… MÁS

Historias relacionadas

El mexicano que hizo renacer la tierra
Conoce al líder ambiental mexicano, Jesús Santos, que transformó su tierra de... MÁS
Agricultores de Oaxaca eligen conservar la naturaleza
Conoce a Alfredo, un joven agricultor de Oaxaca, que se ha convertido en un ejem... MÁS
Pueblo mixteco busca retener jóvenes que migran por la sequía
La sequía ha reducido las cosechas y obligado a los jóvenes mixtecos de Oaxaca... MÁS